Orgullosamente he sido vendedor de seguros e instrumentos de inversión por 25 años. Vendiendo he podido conocer el mundo entero, tener una buena Vida y poder brindarle calidad de vida a mi familia. Cualquier agente de seguros puede lograr lo mismo, si comprende oportunamente, que hay que vender calidad.
No se puede permanecer en este negocio, vendiendo malas pólizas y representando a malas Compañías. Hay que entender que estamos frente a una carrera profesional la cual es muy distinguida y que el triunfar no es tarea fácil, pero quienes lo hemos logrado, lo hemos hecho a base de sacrificios, mucho trabajo y vendiendo calidad.
Considero que es un excelente momento para insistir con las personas que no tienen vigente su póliza internacional o para aquellos potenciales prospectos que pueden adquirir los productos de nuestro portafolio de seguros de salud y vida.
No improvisemos, hagamos las cosas bien para permanecer en el mercado, para conservar el prestigio y para reforzar la fidelidad de nuestros clientes.
Hagamos bien nuestro trabajo porque, además,en el mundo de los negocios es inteligente hacerlo.
¡Que tengas excelentes ventas!